ESCALES DE COLLIR
Aquesta és la història de dos Jaumes de Campanet, avi i net.
El pradí Jaume de
80 anys va fer feina un munté d´anys a una possessió i més tard a una
marmoleria fins que es va jubilar. Un cop jubilat, i com ell m´explica, com que
no li agrada perdre el temps pels bars prenent reventats, va aprofitar que la
família tenia aquesta fusteria per dedicar estones a l´elaboració d´escales de
collir ( jo les vaig conéixer aquí a Mallorca), culleres per recollir figues de
moro i algun estri més. Antigament a la fusteria s´hi feien també rodes de carro.
La serra “sinfín” té més de cent anys.
El net Jaume, està acabant disseny gràfic i els estius ajudava al pradí a la
fusteria.
Aquí us presento el procés d´elaboració d´una d´aquestes escales
que encara avui dia es fan servir al camp per collir figues i altres fruites
així com també amb tamanys més petits per decoració.
Gràcies Jaumes per la vostra amabilitat i per deixar-me
participar del vostre projecte.
ESCALERAS PARA RECOLECTAR
ESCALERAS PARA RECOLECTAR
Esta es la historia de dos “Jaumes”, abuelo y nieto.
El abuelo “Jaume” de 80 años trabajó un montón de años en una
finca y más tarde en una marmolería hasta que se jubiló. Una vez jubilado y,
como él me cuenta, como que no le gusta perder el tiempo por los bares tomando
carajillos, aprovechó que la familia tenía esta carpintería para dedicarse a
ratos a la elaboración de escaleras de recolectar ( yo las conocí al llegar a
Mallorca), cucharas para recoger higos chumbos y algún utensilio más.
Antiguamente en la carpintería se hacían también ruedas para carros. La sierra
sinfín tiene más de 100 años.
El nieto “Jaume” está acabando diseño gráfico y los veranos
echaba una mano al abuelo en la carpintería.
Aquí os presento el proceso de elaboración de una de estas
escaleras que aún hoy en día se usan en el campo para recolectar higos y otras frutas
, y en tamaños menores como decoración.
amo este oficio,primero, mejor y unico
ResponderEliminarmonica mdp
Las fotos perfectas, que bien eterniza en unas fotos nuestro paisaje cultural nuestro amigo Ferran.
ResponderEliminarQue bueno, las imágenes me han traido infinidad de recuerdos de mi niñez, ya que tenía varios familiares que eran carpinteros, y reconozco todas las herramientas y máquinas que salen en es esta historia que nos cuentas, recuerdo hasta el clásico y característico olor a madera, serrín y colas pegamento.
ResponderEliminarEnhorabuena por este nuevo reportaje que nos muestras.
Un Abrazo
En blanco y negro selectivo has capturado, yo creo, uno de los anhelos del ser humano: ascender, curiosear lo más alto, lo que parece limitarle y, ascendiendo sobre la madera, rebelarse y "alcanzarlo". El otro anhelo es volar, desplazarse para sentir, si es posible, deseos de regresar. Lo antiguo sigue siendo lo ESENCIAL. Preciosa serie (par avariar!!;) Un beso grandote (y de madera!)
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, particularmente porque desde hace poco disponemos de nuestro propio taller de carpintería doméstica, en miniatura comparando con este profesional, pero cercano en el reconocimiento de objetos y prácticas comunes.
ResponderEliminarComo siempre, estupendo reportaje detallado y envuelto en afectos. Gracias.
Què guapes, deuen estar contents, no?
ResponderEliminarUNa aferrada
Conxa
Hola Nando
ResponderEliminarQuans records també per a mi veure un taller de fuster. Encara guardo les gubies de la talla de fusta… Molt boniques les fotos, de veritat.
primito ,
ResponderEliminarMe encanta ver tus fotos que son sirmpre tan interesantes e inesperadas !!!!
Carina